Hotel muy, muy grande, recorrerlo de inicio a fin es un muy buen ejercicio, el único pero es cuando tienes que trasladarte de punto A a punto B, no hay suficientes carritos, parece haber más carritos exclusivos para socios de The Club que para el huésped ocasional. Las habitaciones básicas pero funcionales, colchón cómodo, muy limpias y con muy bien servicio de housekeeping. La alberca enorme, con 3 bares de alberca, siempre atendidos bien por los barman. Los camastros son un tema, se llenan y la gente deja separados con una gorra un camastro por todo el día, que al final ni utilizan, algún sistema se debería implementar para esto.
La comida bien, la variedad del buffet bastante buena pero si tu estancia es de 5 días o más, para el 3er o 4to día ya quieres ver algo nuevo en el menú, que la verdad no cambia mucho. Los restaurantes de especialidad están bien, el smokehouse, el italiano y el japonés son recomendables pero los primeros 2 no tienen aire acondicionado, así que en verano es una prueba de resistencia el aguantar el calor.
La playa creo que es el punto débil pero buscamos este hotel por la alberca y lo que pensamos era la zona de niños. Resulta que la zona acuática de niños que me interesaba, el barco con cañones de agua, está en el hotel de a lado y hay que pagar para usarlo, me llevé esta sorpresa pero fue mi error por suponer que la tenía y no preguntar. Si regresaría pero solo 4 noches, suficientes para disfrutar pero no tantas como para aburrirse de la rutina.