Mi experiencia no ha sido muy buena. Llegamos a las 19,30. Nos recibió una señora y nos explicó de forma muy rápida y sin muchas ganas e interés dónde estaba la habitación y las llaves de entrada a la casa, nos preguntó a qué hora queriamos el desayuno y buenas noches. Se quitó del medio y nos dejó en mitad del hall de entrada solos. La casa en general está algo estropeada y la habitación ya se veía algo estropeada del uso también,eso sí, estaba limpia y ordenada. Por la mañana, había otras dos mujeres diferentes atendiendo, fueron algo más simpaticas, el desayuno estuvo bien.