Solo puedo decir que en recepción habia una chica morena de pelo muy corto cuya atención al usuario es ESPECTACULAR. Por lo demás... el estado del local está bien, aunque se podrían mejorar algunas cosas. Servicios: poca variedad n la maquina de vending para comer. Limpieza: creo que para la cantidad de habitaciones que hay y siempre están llenas, debería haber mas personal de limpieza y mantenimiento, ya que en las habitaciones, hay zonas que no hace falta esforzarse mucho para ver el polvo, y el suelo de la terraza, sobre todo las esquinas....xo bueno, el wc si es cierto que lo dejan limpio. También hay que destacar que si llegas antes de las 16h que se hace el chek-in, no hay guardaequipaje como tal, si no que se dejan las pertenencias en un trozo de pasillo arrinconado que hay en la terraza donde cualquier usuario puede tener acceso. Dicen que nunca ha pasado nada y realmente en mi caso no ha pasado nada y todo el edificio tiene videovigilancia, pero en caso que pasara algo, ya se debería de buscar quien ha sido más el disgusto/susto de a quién le pueda faltar algo. A pesar de esto, si vuelvo a Cagliari, sin duda volveré ya que en lineas generales es comodo, centrico y silencioso