Estuvimos un día en Florencia. Hermosa ciudad. El hotel muy cerca de la estación de tren a 5min caminando. El personal muy amables, te hacen sentir en casa, te atienden maravillosamente, Constantino y Ana quien nos preparó el desayuno antes de partir muy temprano, nos llamaron el taxi para el aeropuerto, todo excelente. El hotel es pequeño, en el segundo piso de un edificio antiguo, al llegar te encuentras con un elevador antiguo pero tiene su encanto, ya dentro todo excelente, la habitación muy amplia y cómoda y el baño también. Lo recomiendo y sin duda volvería.