Como cortesía anuncian un servicio de recogida en el aeropuerto, que concerté enviando los datos del vuelo y horarios, confirmándome que acudirían a recogernos. Sin embargo, no había nadie, ni tampoco acudieron después de 40 minutos de espera, pese a enviarles varios correos electrónicos (el hotel está a sólo 10 minutos del aeropuerto).A favor, ponen un transporte gratuito diario al centro de la ciudad desde las 20 horas (es necesario reservar porque sólo hay unas 12-14 plazas)
Incalificablemente, las zapatillas de la habitación estaban usadas, resultando una paradoja que hubiera un cartel en el que te pedían que no te las llevaras porque eran para uso de los huéspedes (y tanto)
El buffet está casi exclusivamente pensado para el huésped chino