El hotel está en una magnifica localización, en general es un hotel normal, sin grandes pretensiones, salvo que pagues un suplemento por una habitación con vistas al mar.
Referente a la habitación, es de tamaño normal y el balcón con vistas mas bien estrecho, pero lo que habría que destacar es el baño, pues la taza está situada enfrente de la mampara y es prácticamente imposible sentarse en la taza en posición normal, lo cual es molesto.
La hora de desayuno es de 8 a 10 de la mañana, lo cual te limita en posibles excursiones tempranas.El día que nos fuimos, tuvimos que salir del hotel a las 7 y solamente nos dieron un café triste, habiendo pagado el desayuno ese día.
La nota que le pondría sería un "normal sin pretensiones"