Los dos grandes inconvenientes que encontramos fueron: la habitación no tenía aire acondicionado y pasamos bastante calor (sobrevivimos a pesar de ello), la chica de la recepción del primer día fue bastante borde... nos dijo que no teníamos desayuno incluido y no era así, además nos cobró un día demás de tasa turística, resolvimos ambos problemas a pesar de su actitud. A favor decir que el hotel está en una zona muy tranquila, muy cerca de la estación de trenes y de la parada del bus del aeropuerto, las habitaciones son grandes, modernas, bastante bien conservadas, el desayuno está bien y se puede repetir, cama cómoda ducha amplia. Al ser también hostel, tiene cocina, salón de estar y terraza comunes bastante amplias. Por cierto, no había TV en la habitación pero la WiFi funcionaba tan bien que pudimos ver Antena 3 a través de la tablet. Cerca del hostel hay varios supermercados.