El hotel está parcialmente renovado y bien situado y el desayuno está bien, teniendo en cuenta qye es un hotel pequeño . No tiene parking propio, y las habitaciones triples son diminutas, ni tienen ni armario, al menos la 302 que es donde nos alojamos nosotros. Tiene una mini barra, para 6 perchas, y 3 baldas, sin puertas ni nada, lo dicho, es una caja de cerillas para 3 personas sin armario. El baño no está renovado, no le vendría mal una renovación.
No repetiremos.