8/10
El hotel está al final de la península que queda al norte de Kas, con lo cual para acercarte a Kas necesitas coche o taxi. Nosotros teníamos coche así que no supuso ningún problema. Aunque Kas se llena mucho por las noches, siempre pudimos aparcar a 10-15 minutos andando del centro del pueblo. El hotel es cómodo, nuestra habitación era amplia y las camas cómodas. La zona de la piscina muy chula y conveniente. Y el desayuno muy bien. Como cosas a mejorar para mi claramente la limpieza de las habitaciones, que no es la idónea. Los baños también podrían mejorarse: están hechos con una especie de cristal esmerilado que no llega al techo (poca privacidad) y las juntas esán bastante envejecidas.
Angels
Viaje de 3 noches en familia