10/10
Nada más llegar ya notamos el trato tan calido que ibamos a recibir. Eramos 4 y la habitación era estilo buhardilla pero muy comoda. Lo más destacable la atención de la dueña, nos preparo el desayuno a nuestro gusto , todo lleno de detalles y se había levantado pronto para hacer el pan y bollitos, los que nos sobraron nos los dió en una bolsita. El trato fue maravilloso. Gracias
Patricia
Viaje de 1 noche