Este hotel de 4 estrellas es de buena calidad en general, recomendable para una visita en Bangkok. En cuanto a comunicación tiene una estación del tren BTS justo delante, por lo que el acceso a todos los sitios de la ciudad es perfecto (el tráfico en Bangkok es terrible). Las instalaciones son muy buenas, tiene una piscina infinita en la planta 14 que es una pasada para relajarte al final de un día de estar pateando por la ciudad. Tiene a pocos metros dos tiendas de comida 24 horas (7-eleven y famili mark) y justo delante uno de los mejores restaurantes de Tailandia "blue elefant".También tiene en la planta 38 un roofrop con unas vistas fantásticas. El desayuno es bastante aceptable, aunque muy enfocado al turista asiático, se hecha de menos más cocina occidental. Un fallo que con la fruta que hay en Tailandia , los zumos sean de bote.
Y lo más importante para mi, soy de sueño ligero, y me dieron la habitación a la calle y no pude dormir en las dos noches que estuve, el ruido de madrugada de las motos y coches y que cada dos minutos pasaba un tren, no dormí nada, me quejé en recepción y me decían que el tipo de habitación que reservé era así.La insonorización es nula, cero. Fallo total por parte del hotel.
El wifi como en casi todo los sitios no va bien, a veces si, otras veces no.
Resumen: Si no eres de sueño ligero, este es tu hotel ,yo no volveré si paso de nuevo por Bangkok.