La habitación muy espaciosa, con pequeño living y kichinette. Buena cama, baño enorme, buena calefacción (hacía mucho frío afuera), buen desayuno, muy buena atención. En seguida resolvieron nuestras dudas (cómo bajar la calefacción, repararon la cerradura magnética que dejó de funcionar, etc)
Pero el motivo principal por el que recomendarímos Starlight es por la calidad humana de quienes trabajan ahí. Nuestra niña se sintió descompuesta justo dos horas antes de terminar la estadía, así que averiguamos las condiciones del late check out, y acordamos quedarnos unas horas más. Cuando finalmente bajamos para irnos, nos encontramos con la amable sorpresa de que no iban a cobrarnos ese tiempo extra.
Fue una caricia para el alma.
Gracias.