Instalaciones muy dejadas. Mobiliario viejo que no han renovado desde hace mas de 20 años. La piscina parece una balsa de recogida de agua y suelos muy sucios con vasos , papeles esparcidos por el suelo, te obligan a llevar gorro que tienes que pagar. En una semana el desayuno no cambió en nada, justito y muy sencillo, un zumo de naranja rojo que no se sabia lo que era. Las hamacas que aparecen en las fotos delante de la playa no se pueden utilizar, son solo para los huespedes de los apartamentos de temporada completa, para los del hotel habia un cuadrado cercado y no delante de la playa. Una fuente en un jardin con el agua sucia y el fondo lleno de basura. Grifo de la ducha que no se aguantaba y para ducharte tenias que aguantarlo. Lo unico bueno el personal, y cambio de toallas diario. Nada mas llegar nos hubiesemos marchado. Las fotos de su web no tienen nada que ver con la realidad. No se lo recomendaria a nadie.