Nuestro vuelo tuvo un cambio de hora y llegamos extremadamente tarde a París, preocupados de que nos cancelarán nuestra reserva llamamos al hotel y la persona que nos atendió solamente hablaba francés y ni hacía el esfuerzo por tratar de entender que decíamos. Una vez que llegamos al hotel no hubo mayor intercambio de palabras ni recibimiento, de verdad que el trato dejaba mucho que desear. Al subir a la habitación nos dimos cuenta que las condiciones no eran las que habíamos visto por la web, la pintura de las paredes estaba bastante deteriorada, las almohadas extremadamente incómodas, la nevera de la habitación no funcionaba, la lámpara del escritorio le faltaban partes. Al entrar al baño observamos la baldosa estaba partida, la poceta despegada y con moho al igual que la ducha, el secador de cabello era tan antiguo que no calentaba y casi no soplaba aire. Para entrar al baño era incómodo, ya que, no podíamos abrir la puerta completamente por la mala instalación del televisor. A la mañana siguiente al salir pasillo vimos que las tuberías eran externas y tanto las paredes como las tuberías tenían filtraciones, bajamos a recepción y había una persona distinta a la que nos había recibido en la noche, esta vez si hablaba inglés, tratamos de preguntar un par de cosas sobre el equipaje pero como digo el trato al público es deficiente, de verdad no eran nada educados. El último día cuando fuimos a hacer nuestro equipaje no encontramos por ningún lado de la habitación un articulo d