Es un Hotel pequeño pero lindo, si tiene un olor característico raro pero luego ya el olfato se acostumbra, las habitaciones son pequeñas pero tienen lo necesario (apenas para ir a descansar), lo único que no me gustó es que no hay servicio de limpieza diario, ni siquiera pagando extra. A pocas cuadras están muchos restaurantes, bares y supermercados, el restaurante que está a un lado está lindo y rico.