La cama era muy cómoda y la estancia dentro de la normalidad, no puedo darle más puntuación porque teníamos una televisión fantasma en la cual se cambiaba solo el canal, se activaba el menú, se bajaba el volumen, al final cuando querías ver algo era literalmente impossible porque estabas en guerra con el mando, escribimos un mensaje a la persona que tuvimos el contacto y aún hoy esperamos una simple respuesta de al menos lo revisaremos,.eso indica despreocupación por la situación, cierto es que no fuimos Andorra a ver la televisión pero si llueve como el Martes o incluso después de cenar antes de dormir quieres ver la televisión con normalidad.