¿Cómo es Castilla-La Mancha?
Hay muchas cosas que a los turistas les gustan de Castilla-La Mancha, especialmente sus restaurantes y sus lugares históricos. Tan solo debes participar en diferentes tours para disfrutar de tu estadía un poco más. Puedes disfrutar un día de descanso en Parque Nacional de Cabañeros y Parque nacional de Cabañeros. Aprovecha para conocer sitios inolvidables, como Catedral de Toledo y Alcázar.
¿Cuáles son los mejores lugares para hospedarse en Castilla-La Mancha?
Estos son los 4 mejores lugares para hospedarse en Castilla-La Mancha:
Hotel La Caminera Club de Campo, en Torrenueva
Hotel de lujo con spa y piscina al aire libre- Desayuno incluido • Estacionamiento gratis • Wifi gratis • Restaurante • Campo de golf
Apartamentos OnceMolinos, en Consuegra
Hotel de estilo mediterráneo en el centro histórico- Desayuno incluido • Wifi gratis en la habitación • Terraza en la azotea
Hospedería Casa De Cisneros, en Toledo
Hostal en el centro histórico en Toledo- Wifi gratis • Restaurante • Terraza en la azotea • Bar
Áurea Toledo, en Toledo
Hotel en el centro histórico en Centro de la ciudad de Toledo- Wifi gratis • Spa • Sala de vapor • Recepción abierta las 24 horas • Personal amable
¿Qué atracciones hay cerca de Castilla-La Mancha?
- Ayuntamiento de Toledo (a 0,1 km del centro)
- Catedral de Toledo (a 0,1 km del centro)
- Alcázar (a 0,3 km del centro)
- Convento de las Agustinas Calzadas (a 0,4 km del centro)
- Edificio de las Cortes de Castilla-La Mancha (a 0,4 km del centro)
¿Qué actividades hay cerca de Castilla-La Mancha?
- Museo de El Greco (a 0,4 km del centro)
- Museo del Hospital de Tavera (a 1 km del centro)
- Parque temático Puy du Fou España (a 6,3 km del centro)
- Señorío de Illescas club de golf y pádel (a 36,4 km del centro)
- Recinto ferial de Talavera de la Reina (a 69,2 km del centro)
Otros puntos de interés en Castilla-La Mancha
- Plaza de Zocodover
- Convento de los Carmelitas Descalzos
- Convento de Santo Domingo el Antiguo
- Puerta de la ciudad Puerta del Sol
- Sinagoga de Santa María la Blanca