Me gustaría haceros conocer las luces y sombras de la calidad del hotel y la estancia, ya que por una parte la ubicación y la habitación estaban dentro de las expectativas, puesto que la ubicación era excelente y la habitación era muy acogedora con una cama y almohadas comodísimas así como las vistas a la ciudad que tenía. La terraza de la última planta era espectacular sin embargo actualmente se está ejecutando la nueva línea de metro, por lo que el ruido de los trabajos no nos permitieron disfrutar de la habitación así como del descanso. Además del desvío que se debe de realizar para acceder andando.
Por otro lado el personal del hotel es muy cercano y agradable, además de coordiales, no obstante el servicio de limpieza es espantoso, ya que la habitación no la terminaban nunca de limpiar antes de las 16.00 h, por lo que también no incomodo a la estancia y no nos permitió de disfrutar de una estancia en Oporto. Para el precio que pagamos por la estancia y la calidad de algunos servicios no parece nada recomendable en estos momentos.