A nosotros nos gustó mucho, tanto la habitación, la localización (apartado pero fácil de acceder), el restaurante (buena cena), el desayuno, como el hecho de que tenga una terraza fácilmente accesible y con visión 360º para intentar "cazar" auroras boreales - Nosotros, a pesar de haber luna casi llena, sí la vimos y quedamos muy contentos.
En definitiva, recomendaría el hotel.