Ha sido una estancia larga y cómoda. El hotel es pequeño pero cuenta con las comodidades típicas, muy bien situado y organizado. Esta regentado por personas cercanas que facilitan información turística, cultural y gastronómica sobre los pueblos cercanos. Cualquier petición puntual fue solventada amablemente. El trato excelente en todo momento y es un detalle que pongan cápsulas de café y chocolatinas en la habitación. Desde luego nos ha sorprendido para bien y volveremos seguro.
La única propuesta de mejora, por sacarle un pero, sería disponer de una pequeña mini nevera en la habitación. Aún así, altamente recomendable.