8/10
Está a menos de 5 minutos de la estación de tren y justo enfrente de la terminal de ferrys para hacer excursiones a las islas de la zona. Hay un sillón de masajes gratuito en el pasillo de cada planta. La habitación, como siempre en Japón, es minúscula, pero lo peor es la cama, que para dos personas es diminuta y es imposible descansar bien. El desayuno está muy bien
Nuria
Viaje romántico de 1 noche