Tuvimos una estancia maravillosa, con muchas facilidades ya que en el hotel te ofrecen todo lo que puedas necesitar; transporte, visitas, excursiones. Es un lugar paradisíaco, la playa está fenomenal. Dormimos en una bungalow, lo que fue toda una experiencia, no teníamos luz de 8 am a 18h00 pero tampoco lo necesitas, ya que a esa hora estas normalmente fuera. El hotel tiene su propio restaurante y bar con precios normales, lo que se agradece ya que es el único lugar para comer por ahí. A 30 min andando en la montaña se puede llegar a un view point donde se ve toda la isla.
Recomendadisimo, nos encantó!