10/10
Esta es la tercera vez que me alojo en el Edoya y espero que no sea la última. La localización del hotel (a un tiro de piedra entre Ueno y Akihabara) es fantástica. Es un hotel tradicional, a primera vista puede parecer algo antiguo pero sus instalaciones cumplen a la perfección su cometido. El personal es tremendamente familiar y amable (algunos de ellos hablan español sin muchos problemas!). Sus habitaciones (tanto tipo europeo como tradicionales con futón) son acogedoras y cómodas. Y sus baños termales ayudan a tener un fin de día relajado antes de acostarse.
Apuesta segura. Gracias por todo y ojala podamos vernos de nuevo pronto!
Angel Luis Torres
Viaje de 4 noches