La situación dela hotel es muy buena. Tienes cerca dos paradas de metro (línea amarilla y verde y línea roja) Además, en la calle paralela hay muchos bares y supermercados, por lo que puedes desayunar y comer sin problemas. La habitación es pequeña pero estárea muy bien equipada (microondas, vitrocerámica, sartenes, plancha, secador...) El baño es muy pequeño, pero para pasar unos días es más que suficiente.
La verdad es que en general la relación calidad precio (al menos en mi caso) ha sido perfecta. Estuve en la habitación 9, y tiene un balcón con vistas a la calle, pensaba que sería más ruidosa por los comentarios que leí, pero todo lo contrario. La calle es muy tranquila y se descansa de maravilla.
Una estancia perfecta.