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Buscábamos un lugar tranquilo en La Rioja y nos hemos encontrado con este fantástico alojamiento tocado por El Norte. Un lugar que dispone de amplias habitaciones, un servicio y atención excelente. Que cuida todos los detalles para que sus huéspedes se encuentren como en casa. Aparcamiento y un jardín encantador. Aparte también hemos disfrutado de la exquisita cocina de este establecimiento y de unos desayunos muy completos para emprender cada dia una nueva aventura por los alrededores. Muy bien situado y con transporte urbano. En una localidad entre viñedos que no olvidaremos. Totalmente recomendable
Olga
Viaje de 7 noches en familia