8/10
Muy buena experiencia. Desde el hotel se puede ir caminando al paseo marítimo o a la reserva natural que está prácticamente al lado. El hotel está bien, tranquilo, buena terraza. Falta un poquitín de mantenimiento. En el desayuno eché en falta leche de soja o avena (cada vez somos más los que desarrollamos estas intolerancias). Y un punto muy positivo: el ecologismo en sus diversas variantes, desde la llave electrónica de madera extra fina hasta el agua embotellada « faite maison ».
Stefan
Viaje de 2 noches