-Había poco personal para dar servicio en el restaurante y por lo mismo la atención era muy lenta y deficiente, sobretodo el viernes y el sábado.
-El costo de la comida no era proporcional, era muy cara.
-El personal de limpieza de las habitaciones rompió mi secadora del pelo Dyson y el hotel no se hizo responsable ni se ha comunicado aún con nosotros, y a pesar de que en recepción ellos nos aseguraron al hacer el check out, de que se reportarían con nosotros a la brevedad para darnos una respuesta y solución a la situación, no fue así, porque ya transcurrió una semana y aún no lo hacen.
-El personal de limpieza al hacer los cuartos, no dejaba jabones ni cremas corporales diariamente como corresponde, solo te ponían uno el primer día y ese pretendían que lo usaras para bañarte y para el lavabo; y al solicitar un repuesto al personal, pretendían cobrar una cantidad extra por cada jabón o crema; considero que el costo por noche del hotel es alto y por supuesto debería cubrir este tipo de cosas por el precio que te están cobrando por la estancia.
-El café que te ofrecían de cortesía por las mañanas llegó en una jarra sucia y sabía terrible a rancio, realmente muy desagradable.
-El personal de recepción jamás respondía el teléfono al igual que tampoco lo hacían en el restaurante cuando les marcabas para solicitar el servicio al cuarto.