El hotel es lindo en general y las habitaciones muy amplias y con muy linda vista. Nos tocó una habitación en el primer piso con una gran ventana y el problema era que cada tanto pasaba alguien caminando (del hotel, empleados o huéspedes) por frente a la ventana lo cual era muy incómodo ya que se veía todo hacia dentro del cuarto. Recomiendo pedir de antemano una habitación en el segundo piso para evitar esta incomodidad.
El otro problema es que queda lejos del centro, son unos 40 minutos a pie o entre $60-70 pesos argentinos de taxi. Si resulta o no un inconveniente dependerá del intinerario de viaje y presupuesto de cada uno. A mi me resultó un poco incómodo.
Si bien hay wi-fi en el hotel (área común), no hay en las habitaciones.
Por otro lado, una chica de recepción nos vendió una excursión que describió mal. Nos dijo que tenía una parte de trekking y fue en parte razón por la que elegimos la excursión pero no era así, así que fue decepcionante.
El hotel sin embargo tiene un mirador que es un living con un gran balcón en un 3er piso muy lindo y con una vista espectacular. Un día que no quisimos gastar en restaurante compramos comida y bebida en una panadería y cenamos en el mirador, estaba muy lindo realmente.
La limpieza de las habitaciones, presión de agua estaba correcto. El desayuno también me pareció muy bueno.
Lo recomiendo en general pero a tener en cuenta las observaciones mencionadas.