Nosotros éramos 4 de familia en una habitación cuádruple así que estuvimos muy bien. Las instalaciones estaban muy limpias. Los baños aunque son compartidos, tienen cabinas individuales cerradas. Las toallas las puedes alquilar por 2libras/estancia. También tienen servicio de guarda maletas gratis en una zona comunitaria cerrada, o bien alquilas una taquilla por 4 libras/dia (nosotros con una taquilla grande tuvimos suficiente para guardar 4 maletas). El desayuno está incluido y tienen una pequeña cocina ponde te puedes cocinar lo que te apetezca y comerlo en el comedor común. Está muy cerca del metro y en 15 minutos llegas al centro (con la oyster card puedes viajar tanto como quieras y pagas como máximo 7 Libras al día). Los metros en Londres pasan cada 2 minutos y toda la ciudad está muy bien comunicada. El barrio del hotel es residencial, tranquilo, con un supermercado enfrente del metro, muchos restaurantes, aunque hay uno italiano "Mezzoroma" en la misma calle de nuestra parada de metro en donde se come muy bien y te hacen pizzas enormes para llevar y cenar en el hotel por 7 libras. El perfil de los huéspedes que nos encontramos era gente "sana", muy agradable. Las recepcionistas muy serviciales y Elena encantadora. Tienen un billar, una televisión grande comunitaria que pasa películas y wifi gratis en todas las instalaciones para poder distraerte y relajarte después de todo un día caminando.
Espero regresar a Londres, y sin duda repetiré este hotel.