6/10
Fue decepcionante encontrarnos con que la habitación no disponía de aire acondicionado; algo que deberían prever ya que en Praga hace mucho calor en verano. Nosotros estuvimos en junio, y la sensación térmica superaba los 30°. Sólo contaba con un ventilador de pié que dejaba mucho que desear.
El desayuno fue aceptable, le faltaban jugos frescos de fruta, frutas y cosas dulces.
Azul
Viaje de 1 noche