100% Recomendable. En especial, por el trato recibido. Mohamed, el dueño del Riad es una persona estupenda, nos facilitó todo lo indispensable para una estancia perfecta. Tuvimos muy buena relación y, a día de hoy, mantenemos el contacto. Al llegar nos invitó a un té y nos recomendó con un mapa muy visual todo lo que podíamos hacer, ver, etc. Nos dio la llave del riad y nos facilitó su teléfono personal para cualquier problema que pudieramos tener. El desayuno ¡¡increíble!! Todo estaba buenísimo. Nos quedamos tres días allí y decidimos volver a pasar otros tres días al final de nuestro viaje, ya que nos hizo sentir como en casa. Soy una chica un poco "tiquismiquis" para viajar y a la hora de valorar mis estancias y os aseguro que es un riad muy muy recomendable. Si vuelvo a Marrakech tengo seguro que volveré al Riad Elixir. Por cierto, la piscina aunque sea pequeñita, es una auténtica pasada, poder llegar al riad tras un día agotador y pegarte un chapuzón se agradece que ni os lo imagináis. Si tenéis pensado viajar a Marrakech y pasar vuestra estancia en un sitio tranquilo y con una buenísima relación calidad-precio; no os lo podéis pensar!!!