Por las espléndidas fotografías que había visto y por el hecho de que las habitaciones estuvieran reformadas de hacía menos de 1 año, tenía unas expectativas que el 66 Imperial Inn DeLuxe no satisfizo. La razón principal es que la limpieza diaria deja bastante que desear, de manera que pese a ser todo nuevo y muy bonito, encontramos rincones y polvo tanto en la habitación como en el baño. Aún así, hay que decir que hoy por hoy este alojamiento está bastante bien.
Por otro lado, pensábamos que la ubicación era un pelo más céntrica, pero la verdad es que hay que andar un buen trecho hasta el centro de Roma. Cierto es que el hotel tiene dos estaciones de metro bastante cerca, pero hay que tener en cuenta que el metro en Roma cierra a las 21h (excepto el sábado que cierra algo más tarde); esto significa que, si sales a cenar al centro o al barrio del Trastevere, te ves obligado a tomar un taxi para regresar, o bien te das un buen paseo de más de 30minutos (más o menos en función de en qué punto concreto te encuentres).
¿Ventajas del 66 Imperial Inn? La estación central de Termini está muy cerca, así que a la llegada y a la partida el hotel está realmente bien situado. El desayuno es bastante bueno, dentro de ser senzillo. Y la atención es buena. Por último, la decoración, como ya he dicho es muy bonita y todo es, al menos de momento, nuevo, incluídas las camas que resultan muy cómodas.