Estuvimos en la Hostería Foike 5 noches en Marzo 2016 con mi pareja. La experiencia fue muy recomendable. Se trata de una hostería pequeña y silenciosa, con habitaciones poco espaciosas pero muy bien decoradas y armadas. El espacio de nuestra habitación era reducido, pero debemos reconocer que la calidad de la cama, sábanas, acolchados, muebles, etc, era muy buena. El piso tenía losa radiante, lo cual a veces obligaba a abrir un poco la ventaba del balcón de nuestra habitación para enfriar el ambiente.
El baño era del mismo nivel, muy limpio, muy bien equipado y moderno. La hostería tiene en su planta baja un living donde se puede descansar y también un comedor con unas pocas mesas, que se puede utilizar libremente. Incluye un desayuno buffet destacable, con medialunas, jamón, queso, huevos, frutas, yogurt, cereales, y más. También hay heladeras con cervezas y bebidas a precios más que convenientes. La atención del personal es sencillamente un 10, siempre predispuestos, sonrientes, pacientes y voluntariosos. Por muy lejos, la relación precio calidad es insuperable. Cuando volvamos a Ushuaia sin dudas nos volveremos a hospedar en este lugar.