La habitación es amplia, aunque las ventanas no se podían abrir, y por tanto, no se podía ventilar.
A la llegada estaba la habitación como una nevera. La climatización no funcionaba bien y únicamente tenía la opción de aire acondicionado. Lo comunicamos a recepción y enviaron a dos técnicos, sin embargo, no pudieron resolverlo y , tras volver a quejarnos, nos proporcionaron un mini calefactor eléctrico. Está solución fue claramente insuficiente, aunque agradecemos la buena disposición del personal de recepción.
Se "olvidaron" de limpiar y ordenar la habitación y estuvimos casi cuatro días en una situación impropia para un hotel de esta categoría.
Cuando, finalmente, nos quejamos y enviaron a alguien para limpiar, lo hizo de manera muy superficial (dejaron vasos y tazas usadas, ropa de cama sin cambiar y mal puesta,etc.)
En general es un alojamiento con mucho potencial pero hay mucho trabajo por hacer en el cuidado del detalle y de la limpieza.