Servicio horrible en recepción, llegamos con un bebe y una embarazada a la hora del check in, sabiéndolo con anticipación, y no tenían la habitación disponible, nos hicieron esperar sin darnos una solución, con una actitud pasiva y soberbia del staff, sobretodo por parte de una señora con acento francés. Por supuesto, el director escondido. Además, decoración antigua y desayuno pésimo. Jamás volveré.