La habitación cuádruple que reservamos no fue respetada, nos enviaron a 2 habitaciones. La chica de recepción tiene un excelente servicio, no así uno de los varones que la atienden en los turnos de la noche; simplemente está ausente, el teléfono cimbraba por las madrugadas sin dejar dormir. Reservamos una noche más debido a la poca disponibilidad, pero había alojamientos de mejor precio e instalaciones cercanos, pedí al chico en turno nos programara un taxi para salir a las 5 am y me dijo que al día siguiente sin problema, pero cuando lo quisimos buscar no estaba en su lugar y tampoco llamó al taxi diciéndome que no se lo había solicitado (llegamos tarde a tomar el autobús). Sin embargo, se agradece guardaran nuestro equipaje hasta nuestro regreso del Machupicchu y el chico de la tarde nos atendió tan amablemente como si siguiéramos alojados.